En España, el sector de la construcción es uno de los más importantes. Tanto que su decaimiento ha supuesto para nuestro país una crisis propia que, sumada a la crisis financiera internacional, es responsable de que la salud de nuestra economía esté mucho más deteriorada que en otros países.
Cuando pensamos en el sector de la construcción, solemos pensar en viviendas, pero este sector abarca mucho más y representa, también, más de lo que parece. ¿Realmente conocemos el sector de la construcción en España?
Relevancia del sector de la construcción en España
Como os he comentado, este es uno de los sectores con mayores números. Antes del estallido de la burbuja, en 2007, este sector representaba el 10% del PIB del país, daba empleo al 11’3% de la población ocupada
y constituía el 57% de la inversión
que se realizaba en nuestro país.
Su relevancia en nuestra economía se debe a varias razones:
El problema más relevante de la construcción es que es muy dependiente del ciclo económico. Por este motivo, las empresas constructoras consolidadas suelen diversificar su actividad a otros países o sectores más rentables.
Los mercados de la construcción en España
Dos son, fundamentalmente, los principales mercados de la construcción en España:
Mientras que el mercado de obra civil es relativamente estable, aunque no en los últimos tiempos, es en el mercado residencial donde se corren mayores riesgos. Tal y como ha sucedido durante esta crisis, muchos constructores se han encontrado con solares ,comprados a precios desorbitados, en los que no resulta rentable edificar debido a la caída de precios de la vivienda.
La política de la vivienda en España
El mercado de la vivienda español, está tan regulado como segmentadas, en niveles de gobierno, están estas regulaciones. Las comunidades autónomas tienen las competencias relativas a la legislación urbanística y la aprobación del planeamiento en materia de vivienda, las corporaciones locales tienen las competencias en formulación y ejecución de dicho planeamiento y, por último, el estado se reserva las competencias relativas a la vivienda de protección oficial o VPO.
Normalmente, el estado limita los precios de la vivienda protegida o bien subsidia la carga financiera necesaria para su adquisición. Debido principalmente a dicha limitación de precio, se produce una escasez más o menos permanente de VPO. Realmente, la VPO carece prácticamente de ayudas de modo que sólo es rentable construirla en aquellos lugares en los que los precios de adquisición se acercan a los del mercado libre.
Otro de los puntos reseñables de la política de vivienda en nuestro país está constituido por las ayudas fiscales a la adquisición de vivienda. Hasta ahora, un comprador se podía deducir entre el 15 y el 25% de la suma de las cantidades invertidas. Estas ayudas fiscales se encuentran próximas a extinguirse en algunas comunidades autónomas y ya se han extinguido en otras.
Los problemas del urbanismo en España
El urbanismo español es el único campo de la economía donde todavía funcionan los sistemas de planificación centralizada. Esto introduce un importante retardo temporal entre el momento en que se decide la calificación de un terreno como urbanizable hasta que se convierte en urbano. Este retardo:
La transformación del suelo urbanizable en urbano, se ha visto encarecida como consecuencia de su utilización para financiar las arcas municipales y autonómicas